En este año me he dado a la tarea de mejorar mi técnica de ilustración, tomar algunos cursos y buscar mi voz como artista. ¿Voz? ¿Khá?¿Qué es eso? Así se le llama al conjunto de características de estilo, temática o elementos repetitivos en la obra de un artista, que le diferencian de otros. Así llegue al libro llamado Finding your Artistic Voice de Lisa Congdon.

Y nope, no haré un resumen. Tanto por cuestiones de derechos de autor, como por que creo que es importante leer los libros completos (nada de te lo resumo así nomás). Peeeero, les compartiré algunos puntos que me parecieron importantes y útiles.


Puntos:

Hablar tu verdad. Tu voz como artista es tu propia perspectiva sobre la vida; son tus experiencias, aprendizajes y lo que quieres comunicar. Para comunicar esa verdad, la técnica importa, porque, a mayor habilidad mejor comunicación. 

“The whole ponit of illustration is to help people see things differently.” – Sean Qualls

Fallar. Si no fallas es que no estás haciendo nada. Nada será demasiado fácil, tu estilo no será como lo esperas desde un inicio (o tal vez nunca), pero tienes que trabajar por lograrlo y fallar. Dentro de este rubro, también viene el punto de no intentar complacer a todo el mundo, tu trabajo no le gustará a todos, y si lo intentas, probablemente acabarás con algo mediocre y aburrido.

La chispa. Es muy bonito cuando de pronto se nos ocurre una gran idea y eso nos llena de inspiración, pero como todo en la vida, esto se acaba… De vez en cuando nos da flojera, o  no se nos ocurre nada  -El famoso bloqueo del artista-. Pero esto se puede manejar a través de la disciplina y el calentamiento. ¿Calentamiento global? Nope. Se trata de hacer ejercicios artísticos constantes sin que nos importe el resultado. El punto es siempre hacer algo aunque no tengas ganas. Entre más lo hagas, más entrarás a la zona.

Influencias. Es inevitable tener influencias, las busques o no, están en todas partes. Y no tiene nada de malo copiar a tus artistas favoritos (no plagiar, ya te vi calcando), siempre y cuando les des crédito. Puedes experimentar con un estilo en una técnica diferente a la de tus influencias.  También es importante saber de dónde vienen, no solo copiar por copiar, sino entender a la persona, conocer las influencias de tus influencias. Hacer la tarea… Y agradecerles cuando puedas, apoyando su trabajo o hasta escribiéndoles. Nunca sabes cuánto lo pueden apreciar.

Alguna vez hice un dibujo de uno de mis ilustradores de cómic favoritos, Cliff Chiang, lo subí a Instagram y le puse el hashtag con su nombre. Me sentí extremadamente sorprendida de que le dio “me gusta”, eso obviamente me puso muy feliz y supongo que a él también 🙂 (toda fan girl).

“You should copy, but only copy authentically.”- Jim Jarmush

Ahora, también es importante alejarse de vez en cuando de las influencias y trabajar sin referencias, es decir, no internet, no libros, no nada… Eso ayudará a que identifiques esos rasgos únicos de tu estilo.

Estar presente. Este punto me pareció muy lindo y relevante. Se trata de “estar” cuando tu comunidad artística lo necesita, como ir a presentaciones de tus colegas y apoyarlos en general. La comunidad es importante, como he mencionado en otras publicaciones. Además de estar presente para una misma, no dejar de cumplir con tus horarios de trabajo y fechas de entrega.

Sh*t happens. Todo lo anterior suena muy bonito y alentador, pero es verdad que algunas cosas saldrán mal, que algunas ilustraciones (o muchas) serán horribles. Pero eso es parte de la vida, no hay que clavarnos tanto con el perfeccionismo. Lisa nos recomienda darle un gran abrazo al miedo. Está bien tener miedo, eso significa que estás saliendo de tu zona de confort y puede indicar que estás llegando a algo innovador y brillante. Hay que arriesgarnos, ser rebeldes y aceptar el hecho de que eso nos pude convertir en unos raritos. No importa quien ponga atención o no, tú haz lo que tienes que hacer.

Piensa como principiante. El último punto que quiero comentar se trata de no dejar de aprender. Tener la capacidad de experimentar, sorprendernos y no llegar a pensar que como ya tenemos un estilo, ya no tenemos nada que aprender. Eso lleva al estancamiento y el aburrimiento, y nadie quiere eso.

Hay muchas otras cosas que aprender de este libro, pero pues léanlo no sean codos.  Lisa tiene otras publicaciones dirigidas a artistas, como el libro llamado Art Inc. que estoy leyendo ahora y que habla de cómo llevar tu negocio como artista. Muy recomendable también.

Y bueno, ya saben, pueden opinar diferente, todo se vale. Yo solo comparto esta información para quienes les resulte útil como a mi. Espero que así haya sido 😀

Déjen sus comentarios abajo o no, hágan lo que quieran. Besos bye.